Ahorra en calefacción: Instala un cabezal termostático

Elena

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Ahorra en calefacción: Instala un cabezal termostático

En un mundo donde la eficiencia energética es cada vez más relevante, es importante conocer las estrategias para ahorrar en nuestra factura de calefacción y al mismo tiempo, incrementar el confort en nuestro hogar. Una de las formas más prácticas de lograrlo es mediante la instalación de válvulas termostáticas en los radiadores. En este artículo, exploraremos cómo estas válvulas pueden ayudar a gestionar de manera más eficiente el consumo energético y qué pasos debemos seguir para instalarlas en nuestro sistema de calefacción.

Historia y Evolución de las Válvulas Termostáticas

Ahorra en calefacción: Instala un cabezal termostático

El concepto de las válvulas termostáticas no es nuevo. De hecho, la primera válvula termostática fue inventada en 1943 por Paul Closer, marcando un hito en la regulación del calor en los sistemas de calefacción. Con el paso de los años, desde 1955, estas válvulas comenzaron a comercializarse masivamente, revolucionando la forma en que se climatizaban los espacios.

Componentes de una Válvula Termostática

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Una válvula termostática se compone de dos elementos clave:

  • Válvula termostatizable: Es la encargada de controlar el flujo de agua que entra al radiador.
  • Cabezal termostático: Actúa sobre la válvula y ajusta el flujo en función de la temperatura de la estancia.

La mayoría de las instalaciones de calefacción modernas ya incluyen válvulas termostatizables, pero si nuestra instalación no cuenta con ellas, es posible realizar un cambio sencillo para mejorar nuestro sistema.

Sustitución de Válvulas Manuales por Termostatizables

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Paso 1: Preparación

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Para reemplazar una válvula manual por una termostatizable, el primer paso es drenar el circuito hidráulico de la calefacción. Luego, con una llave inglesa, aflojamos las tuercas de la válvula actual para poder retirarla.

Paso 2: Elección de la Válvula Adecuada

Al ir a comprar la nueva válvula, es recomendable llevar la antigua para asegurar que el tamaño de los racores de unión sea el correcto y garantizar así una instalación adecuada.

Paso 3: Instalación de la Válvula Nueva

Una vez adquirida la válvula correcta, procedemos a instalarla en el lugar de la antigua, asegurándonos de que quede bien ajustada para evitar fugas.

Instalación del Cabezal Termostático

Paso 1: Retirar el Accionador Manual

Con la válvula termostatizable ya instalada, retiramos el accionador manual. Si es necesario, podemos ayudarnos con una llave para aflojarlo.

Paso 2: Colocación del Cabezal Termostático

El cabezal termostático se instala fácilmente a mano. Fijamos primero la parte de plástico y luego enroscamos el cabezal, asegurándonos de que quede completamente apretado para una regulación precisa de la temperatura.

Paso 3: Ajuste de la Temperatura

Los cabezales termostáticos cuentan con una escala numérica que corresponde a diferentes temperaturas. Seleccionamos el número deseado que represente la temperatura de confort, por ejemplo, el número 3 para 20 grados.

Beneficios de las Válvulas Termostáticas

Al utilizar válvulas termostáticas, se distribuye la energía de manera más eficiente en las diferentes habitaciones de la casa. Esto se traduce en un ahorro del 10 a un 15% en el consumo energético de la calefacción y, por ende, una reducción en el gasto de combustible. También, la inversión inicial se recupera rápidamente, ya que el coste de estas válvulas es bajo y su periodo de amortización es inferior a dos años.

Implementar válvulas termostáticas y cabezales termostáticos en nuestros radiadores es una acción sencilla que podemos realizar para mejorar la eficiencia de nuestra calefacción. Con pequeños cambios en la instalación, no solo ahorraremos dinero, sino que también contribuiremos a un uso más responsable de la energía en nuestros hogares.

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