La confección de prendas a medida para muñecos es un arte delicado que requiere precisión y creatividad. A menudo, los entusiastas del tejido buscan maneras de crear abrigos personalizados que se ajusten perfectamente a las dimensiones de sus queridos juguetes. En este artículo, proporcionaremos una guía detallada sobre cómo tejer un abrigo con capucha para un muñeco, solucionando las posibles dudas y problemas que puedan surgir durante este proceso artesanal. Desde la elección del material hasta los toques finales, cada paso será explicado para ayudar a que tu muñeco luzca un abrigo hecho a mano con amor y cuidado.
Materiales necesarios y preparación de la lana
Antes de comenzar, es importante reunir todos los materiales necesarios. Para este abrigo, utilizaremos:
- Lana de calibre mediano
- Agujas de tejer número 3
- Ganchos de espera
- Argollas de marca
- Aguja lanera
Con solo 30 gramos de lana, podremos confeccionar la prenda. La elección de una lana no muy gruesa y el uso de agujas número 3 son esenciales para obtener un tejido fino y adecuado para el tamaño del muñeco.
Medición y muestra de tejido
Inicio con la medición del muñeco. Es crucial medir el ancho del cuerpo del muñeco cruzando la cinta métrica sobre su pecho, lo que en nuestro caso resulta en 28 centímetros. Esta medida nos servirá de referencia para la muestra de tejido.
Para la muestra, montaremos 20 puntos y procederemos a tejer en punto de musgo, que consiste en tejer todos los puntos al derecho. Una vez finalizada la muestra, la comparamos con las medidas del muñeco para asegurarnos de que el tamaño es el correcto.
Tejiendo las mangas y el cuerpo del abrigo
Confección de las mangas
Una vez confirmado el tamaño de la muestra, pasamos a tejer las mangas, respetando la altura necesaria que, en este caso, es de seis centímetros. Recordemos hacer un nudo al finalizar y reservar los puntos en un gancho de espera.
Tejido del cuerpo
Para el cuerpo del abrigo, montamos 64 puntos y seguimos tejiendo en punto de musgo, prestando especial atención al primer y último punto de cada hilera, para que el borde quede prolijo. Seguimos tejiendo hasta alcanzar la altura deseada, la cual debe ser la misma que las mangas.
Uniendo las piezas y formando el ranglan
El momento de unir las piezas es crucial. Comenzamos por unir los puntos del cuerpo y las mangas, intercalando argollas de marca para formar el ranglan. Es importante que las mangas estén colocadas correctamente, con la lana en el mismo lado que el cuerpo. También es el momento de realizar los ojales en las uniones, asegurándonos de que no queden demasiado grandes.
Cierre de la capucha y toques finales
Cerrando la capucha
La capucha se teje recta hasta obtener el alto necesario, que se mide desde el centro de la cabeza del muñeco hasta su hombro. Para cerrarla, podemos optar por unir los puntos de la capucha por la mitad, tejiendo dos puntos como uno solo hasta el final.
Detalles y decoración del abrigo
Finalmente, cerramos las mangas y añadimos los botones, escogiendo aquellos que complementen el color del tejido. Es importante rellenar cualquier hueco en las uniones de las mangas con la aguja lanera para un acabado limpio y profesional.
Al vestir el muñeco con el abrigo recién tejido, vemos el resultado de nuestra labor: una prenda cálida, confortable y a medida. Con estos pasos, podemos personalizar el abrigo a nuestro gusto, ajustando medidas y detalles para que cada muñeco luzca una pieza única tejida con dedicación.